En el último día idóneo para sus condiciones Alejandro Valverde se ha desquitado de toda esa mala suerte que le perseguía en esta edición. El corredor español llegaba a meta visiblemente emocionado. Tanto sus lágrimas de hoy como las de Australia demuestran el sufrimiento que ha pasado Alejandro durante todos estos años en los que se ha sentido señalado. Por suerte el murciano tiene una larga lista de seguidores que hemos permanecido con él en los peores momentos. Este éxito es motivo de alegría sabiendo que este Tour es la primera ronda de tres semanas que disputa desde La Vuelta que se adjudicó en 2009.
La alegría era máxima y el ciclista del Movistar se acordó de todos de los que se ha rodeado en esa travesía: "Ha sido una victoria de mucho sufrimiento. El Tour ha sido muy duro para mí y para el equipo y al final se ha conseguido el triunfo, muy trabajado por el equipo. Se la dedico a ellos, a todos los que me han apoyado y a Xavi Tondo", declaró en línea de meta. Alejandro no escondió su profunda satisfacción: "Es una victoria más especial (tras la sanción) porque han sido dos años muy duros, pero aquí estamos trabajando y ganando. Estoy muy feliz, no es pera menos. Era algo que llevaba mucho tiempo esperando y ha sido una victoria muy trabajada y buscada. Yo he dado todo lo que tenía dentro de mí y cuando he visto la llegada ha sido una alegría tremenda en una etapa muy dura y muy importante", sentenció.