Valverde: "Sabía que con un poco de suerte podría ganar una gran vuelta"

El ciclista español Alejandro Valverde (Caisse D'Epargne), a falta de una etapa para finalizar la 64 Vuelta a España, analizó su previsible primera victoria en una gran prueba por etapas en la que ha variado su habitual forma de correr y ha tratado de "ahorrar mucha energía" para conseguirlo.

También ha señalado el Tour de Francia y el Campeonato del Mundo como dos de las pruebas que le gustaría sumar a su amplísimo palmarés y para las que cree estar capacitado "con paciencia" para hacerlo.

Sobre la decisión el próximo mes de noviembre del TAS sobre la sanción que le impuso el CONI por su presunta implicación en la Operación Puerto se limitó a señalar que "cuando llegue llegará".

P: Cómo se siente tras estar a punto de ganar su primera gran vuelta?

R: Me siento muy contento y liberado, tenía muchas ganas de ganar una grande y sabía que podía con suerte ganarla. He estado muy centrado y concentrado, con un gran equipo a mi lado y sin gastar en los momentos innecesarios

P: Tras ganar la Vuelta, piensa que puede hacerlo en el Tour de Francia?

R: Sigo pensando lo mismo y creo que puedo disputarlo, aunque es muy difícil pero se puede hacer. Después de una Vuelta durísima y con rivales muy fuertes creo que puedo ganarlo aunque Alberto Contador está muy fuerte pero se puede intentar.

P: Con un palmarés tan amplio y variado que le gustaría añadirle?

R: Lo mismo que siempre, ganar un Tour de Francia y un Mundial. Con paciencia creo que se puede conseguir, pero no es fácil.

P: En esta Vuelta se ha mostrado más conservador y calculador, ha tenido algo que ver su director?

R: Aparte de que Eusebio Unzue me lo dice desde hace varios años, sabía que en un recorrido tan duro debía ahorrar mucha energía, como dice el eslogan del maillot oro. Si analizamos las vueltas que he ganado esta temporada, como Dauphiné Liberé, Volta a Catalunya o Vuelta a Burgos, no he ganado ninguna etapa y aquí ha sido igual.

P: El pinchazo que hizo perder un minuto a Cadel Evans en la etapa de Sierra Nevada ha sido fundamental para el desenlace final?

R: Estaba cerca en la clasificación pero fueron circunstancias de carrera. Tras el pinchazo intentó remontar y no recortó ni un segundo, pero también es verdad que de no haberle pasado no se hubiera descolgado. No sé si hubiera sido más ofensivo de no haber perdido ese minuto porque estaba un poco distanciado y entre comillas no era peligroso.


P: Su triunfo es el primero de un murciano en la Vuelta, cómo lo califica?

R: Es muy importante para mí y para la región. Se lo merecen porque siempre me han apoyado y una parte de él está dedicado a ellos. Mi victoria se la dedico a todo el mundo que me ha respaldado, a mis hijos que los quiero mucho y a mi nueva compañera.

P: Su peor momento fue en la ascensión a La Pandera cuando se descolgó unos momentos de sus rivales

R: Fue un momento de un poco más de debilidad, pero después de ese kilómetro me fui arriba y supe remontar. Todos los que ha ganado una gran vuelta saben que se pasan uno o varios días malos, pero hay que saber llevarlos y que el rival no lo note. Los he tenido.

P: En el Mundial de Mendrisio (Suiza) dentro una semana puede tener una buena oportunidad para lograr el maillot arco iris. Quienes pueden ser sus rivales?

R: Los principales rivales van a ser las selecciones de Italia y España. Viendo la forma que ha demostrado Damiano Cunego en la Vuelta puede ser el más fuerte, porque el recorrido le viene bien.

P: Tras no poder participar en el Tour de Francia, cómo se mentalizó para estar a su mejor nivel en la Vuelta a España?

R: Es fácil motivarse. Tenía que ir a buscar la Vuelta y así ha sido. Centrarme, aislarme de todos los problemas y entrenar, trabajar y descansar ha sido lo que me sirvió para hacerlo.

P: Piensa en la decisión que tiene pendiente el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) sobre la sanción que le impuso el CONI para competir en Italia y que previsiblemente dará a conocer en noviembre?

R: No lo pienso. Cuando llegue el día, llegará y ya está.

P: Cómo ha sido esta edición de la Vuelta?

R: Ha sido una edición realmente dura, con muchas llegadas en alto, muchos días con cinco o seis horas sobre la bicicleta y en varias etapas con más de cinco mil metros de desnivel acumulado. A ello se han unido diez días seguidos de etapas sin descanso.

P: Ha dejado atrás su lucha por objetivos pequeños como victorias parciales de etapa?

R: Si tienes la recompensa de ganar una clasificación general no cuesta nada renunciar a esos objetivos pequeños.

Fuente: Todociclismo.com

¡¡Alejandro Valverde gana La Vuelta 09!!

Alejandro Valverde se convirtió en virtual campeón de la Vuelta Ciclista a España 2009 después de la contrarreloj de 27,8 kilómetros repartidos por Toledo. El murciano fue séptimo pero conservó la ventaja con todos sus máximos rivales, donde Samuel Sánchez conservó la segunda plaza y Cadel Evans se hizo con el tercer puesto. El vencedor del día fue el británico David Millar.

Alejandro Valverde ya tiene su primer grande. Después de una temporada de lo más complicada con la sanción del CONI (que le prohíbe correr en territorio italiano), el murciano ha conseguido desquitarse de forma espectacular. Y, como se suele decir, en casa mejor que en ningún lado.

Una complicada temporada
El líder del Caisse D’Epargne cumplió muchos de los pronósticos y se hizo con una Vuelta que siempre se le puso de cara. Sus máximos rivales no le intimidaron en la montaña y, con bonificaciones y una gran respuesta en todos los terrenos, Alejandro se hizo con el triunfo.

La contrarreloj de Toledo era la última piedra en su exitoso camino. Un recorrido de casi 28 kilómetros le separaba de la gloria y respondió como lo que es, un excelente ciclista. La referencia la marcaba el británico David Millar, que fue el vencedor final tras marcar un registro de 35:53.

Pero lo bueno estaba por llegar. El liderato de Valverde parecía casi inalcanzable para Samuel Sánchez, que tuvo que defender su segundo puesto ante un Cadel Evans que iba como una moto. El autraliano dobló como un rayo a Ezequiel Mosquera y arrebató la tercera plaza del cajón a Ivan Basso, muy lento en el día de hoy.

Excelente crono de Samu
Pero el asturiano del Euskaltel hizo gala de orgullo propio y metió el turbo para terminar con el segundo mejor tiempo del día, a tan sólo 5 segundos de Millar y 9 mejor que Evans. Pero su excelente crono no fue suficiente para poner nervioso a Alejandro Valverde, que por su pinganillo no hacía más que oir buenas noticias.

Al final, el murciano logró el séptimo mejor tiempo, 31 segundos peor que 'Samu', pero que le servía para conquistar definitivamente el oro, el mismo que brilla en su maillot y que guardará como recuerdo de su primera gran carrera, y quizás no la última.

Fuente: Marca.com

Cobo ataca en La Granja y Valverde se asegura La Vuelta a la espera de la crono toledana

Alejandro Valverde entró el segundo en la meta de La Granja por detrás de Juanjo Cobo, ganador en solitario de la 19ª etapa de la Vuelta a España. Gracias a las bonificaciones y a los segundos cogidos en meta, Alejandro aumentó su ventaja en la clasificación general donde, en vísperas de la contrarreloj que se disputará mañana en Toledo, adelanta a Samuel Sánchez en 1’26”.

“Es demasiado temprano para cantar victoria porque queda un etapa muy importante, pero si ayer comenté que el 70% estaba hecho ya, hoy solo falta un 10%”.

“Comenzamos el día bajo el sol, pero una vez que empezó a llover las condiciones climáticas se pusieron terribles. Sin embargo, hoy tal como me habéis visto en toda esta Vuelta, he estado muy atento hasta el final a pesar del nerviosismo y eso seguro que lo debo a la madurez y a lo que he aprendido de los errores cometidos en el pasado”.

“Así como todos esperaban, mis adversarios intentaron atacarme tanto subiendo como bajando, pero yo no tenía ninguna intención de dejar a nadie sacarme tiempo”.

“Al final he sido yo el que ha ganado tiempo, gracias a las bonificaciones cogidas en el sprint intermedio y en la meta. Mañana, cada segundo será importante y no quería desaprovechar ninguna oportunidad de aventajarme en unos segundos”.

“Quiero dar un diez a todos mis compañeros del equipo Caisse d’Epargne que hoy como cada día realizaron una labor excepcional. Mañana el trabajo será todo individual y espero que el oro será definitivamente mío”.

Deignan gana en Ávila y Manuel Vázquez hace una gran etapa situándose bien en la General

Philip Deignan dió a su país, Irlanda, un triunfo que se resistía en la Vuelta desde los ochenta. El corredor del Cervélo se manejó muy bien en la numerosa fuga de la jornada imponiéndose en el sprint al checo Roman Kreuziger. El del Liquigas lanzó un ataque imponente en la bajada del Alto del Boquerón y sólo Deignan logró seguirle. En los últimos metros se precipitó con un ataque que acabaría agotando sus fuerzas. No pudo disputarle la victoria al irlandés.

Manuel Vázquez, el granadino del Contentpolis AMPO Murcia, logró dar un importante salto hacia adelante en la general provisional merced a su activa participación en la fuga de esta décimo octava etapa, con meta en Ávila, donde acabó cuarto. El Contentpolis AMPO Murcia recibió de manos de Christian Prudhomme, director general del Tour de France, el premio al Mejor Equipo clasificado en la meta de Talavera de la Reina.

Aitor Pérez volvió en el día de hoy a probar fortuna durante los kilómetros iniciales, pero una vez más no contó con el permiso de un intransigente pelotón .

Habría que aguardar hasta enfilar las primeras rampas de ascensión a Mijares para poder dar por buena una fuga en la que lograba colarse el mejor de los Contentpolis AMPO Murcia en la general provisional, Manuel Vázquez. Pero los compañeros de viaje no eran lo más deseable: Antón (Euskaltel-Euskadi), Valjavec (AG2r), Deignan (cervelo) , Moncoutie (Cofidis), Taaramae (Cofidis), Del Nero (Fuji Servetto), Kreuziger (Liquigas), Fuglsang (Saxo Bank), Hernández (Astana), Di Gregorio (Française), Herrero (Xacobeo), Breschel (Saxo Bank), Cherel (Française), Bingen Fernández (Cofidis) y Gilbert (Silence Lotto). Por la cima de este primer alto montañoso de primera categoría, éste grupo de 16 coronaba con 3:51 de ventaja sobre un pelotón del que tiraba Euskaltel Euskadi. Los 'naranja' contaban con Antón por delante, pero no parecían dispuestos a que cobraran una ventaja de la que pudieran arrepentirse después. De igual manera, los vascos también miraban por los intereses de Samuel Sánchez de cara a su puja por el liderato. Pero no llovió, y aunque los Caisse d'Epargne de Valverde cogieron la batuta antes de Collado Mediano, una 'trampa' de segunda categoría a la salida de El Barraco, nada pudieron hacer ya porque los de delanta se jugaran la victoria de etapa.

En esa lucha entró Manuel Vázquez. El granadino salió en busca de Gilbert, al que incluso llegó a darle caza en las rampas del tercer y último puerto de la jornada, el del Boquerón, pero Kreuziger por detrás procuró el acercamiento de Herrero, y con ello, posteriormente la anulación del cuarteto de cabeza a causa del arreón de Fuglsang y de Deignan. Gilbert perdió contacto, a la vez el grupo de fugados perdía unidades. "Por unos momentos creímos que el grupo perseguidor en que quedó Vázquez sería capaz de dar alcance a Deignan y Kreuziger y a Fuglsang, y aunque hubo entendimiento, no fue posible. La actuación de hoy de Vázquez ha sido lo más cercano que hemos tenido una victoria en esta Vuelta. Qué pena que no saliera adelante el cuarteto que se formó en el Boquerón con Gilbert, Vázquez, Kreuziger y Herrero, que llegaron a alcanzar una treintena de segundos de ventaja mientras que por detrás se miraban a las caras", expresaba con resignación en la meta de Ávila Manuel López, director del Contentpolis AMPO Murcia.
La ilusión se mantuvo hasta el final, hasta cuando se pisaban los adoquines de la mítica ascensión de las murallas de Ávila, cuando el dúo de cabeza, el formado por el ganador Deignan y Kreuziger estaba a poco más de una treintena de segundos, y en el grupo perseguidor Vázquez salía en su búsqueda en compañía de Antón, mientras que Fuglsang se mantenía entre ambos dúos.

Alejandro: "Mañana saldré motivado por tener tan cerca mi primera gran vuelta"

Alejandro Valverde fue 20° en la decimoctava etapa de la Vuelta a España disputada hoy entre Talavera de la Reina y Ávila sobre la distancia de 165 kilómetros y bajo condiciones climáticas muy difíciles.
No hay cambios en la clasificación general donde Alejandro sigue de líder, con una ventaja de 31 segundos respecto a Robert Gesink y 1’10” a Samuel Sánchez.

“Hoy también la etapa salió a tope y la tensión y el nervosismo se hicieron notar.”

“El recorrido no era nada fácil, con un desnivel de 1400 metros y propicio a los ataques. No había ningún hombre peligroso para la general en la fuga y dejamos hacer, controlando el pelotón.”

“La más difícil hoy ha sido tener que aguantar el frío: 8 grados en la cumbre del alto de Mijares y una media de 12 grados durante el día. Se puede decir que en esta vuelta hemos pasado por todos los climas posibles.”

“Mañana nos espera la última etapa de montaña. Seguro que mis rivales lo van a intentar aprovechar esta última oportunidad para atacarme y me voy a fijar en todos sin descartar a ningún adversario que se encuentre entre los seis primeros de la general.”

“Saldré con mucha confianza, arropado como cada día por un gran equipo, y muy motivado por la idea de conseguir mi primera victoria en una grande de tres semanas.”

Jornada importante en La Vuelta

Llegan los últimos días decisivos de La Vuelta 09 donde Alejandro Valverde tratará de defenderse de sus rivales en las siempre duras etapas de Ávila y Segovia.

La decimoctava etapa de la Vuelta'09 unirá las ciudades de Talavera de la Reina (Toledo) con la capital de esa provincia en un viaje más complicado de lo que aparenta, ya que al exigente puerto de Mijares se une el alto de El Mediano, un puerto corto pero con rampas casi siempre por encima del 10% de desnivel.

Esta etapa de Ávila, la tercera más corta de la 64 edición de la Vuelta a España al margen de las dos cronometradas, puede cambiar el desarrollo de la carrera, aunque para ello será necesario que los ciclistas actúen a la antigua usanza y lancen ataques desde lejos para conseguir su objetivo.

La ascensión al puerto de Mijares, de casi veinte kilómetros con una pendiente media del 5,2% y rampas de hasta el 7,5%, debería servir para separar el grano de la paja y que los aspirantes al triunfo final vivan un enfrentamiento mano a mano en el alto de El Mediano, donde cualquier desfallecimiento se pagará muy caro.

Además, los dos esprint intermedios de la jornada, con sus respectivas bonificaciones, están intercalados entre Mijares y El Mediano.

- Etapa 18: Talavera de la Reina - Ávila, 165 kilómetros. (Bonificaciones 20, 12 y 8 segundos).

Salida real: 13:10 horas

- Puertos:

Puerto de Mijares (1a): 57,2 kms

Alto El Mediano (2a): 120 kms

Alto del Boquerón (3a): 148 kms

Sprint Intermedio (bonificaciones 6, 4 y 2): en los kilómetros 93 en El Barraco y 112,8 en El Herradón.

Roux rompe el guión. Caídas de Mosquera y Gesink antes de la montaña

El francés Anthony Roux, de la Francaise des Jeux, sacó provecho de una escapada de principio a fin para imponerse, por una bicicleta, en la decimoséptima etapa de la Vuelta, jornada de transición con 193 kilómetros de trayecto entre Ciudad Real y Talavera de la Reina en la que Alejandro Valverde mantuvo el jersey oro de líder.

Roux se salvó por un par de metros. Ese fue el margen de error del malvado pelotón, que se quiso engullir entero al francés, pero éste se rebeló ante la marabunta para firmar a sus 22 años la primera victoria profesional. Por los pelos, pero suficiente para estrenar a su equipo. Cruzó la línea en 4h.28.14, el mismo tiempo del gran grupo, encabezado por otro francés, Wiiliam Bonnet (Bouygues) y el alemán André Greipel, que no volvió a mojar porque a su equipo le falló la calculadora.

Manera agónica, pero dulce y bonita, de rematar en su primera gran vuelta una escapada de 187 kilómetros, prácticamente de salida. Un premio con intriga "al lado de un río muy bonito que había a la derecha". Hasta le dio tiempo al francés de constatar la presencia del Tajo.

Otra etapa de bostezo y guión escrito, aunque no exenta de sobresaltos considerables. Mal asunto si la Vuelta tiene que depender de caídas para escribir su historia. Primero hubo pinchazo de Valverde, el segundo consecutivo para el murciano, que no pinchó en el objetivo de mantener el oro de su jersey con 31 segundos sobre el holandés Robert Gesink y 1.10 minutos respecto al campeón olímpico Samuel Sánchez.

Luego hubo guantazo. En el kilómetro 129 se produjo una montonera con varios implicados. Allí estaba el gallego Ezequiel Mosquera, que no se pierde una. El líder del Xacobeo se golpeó la cabeza, rompió el casco y anduvo desorientado unos instantes. Susto en la casa de Alvaro Pino, que no gana para disgustos, el hombre. En el accidente también sufrió daños de chapa y pintura Robert Gesink.

Cuando se produjo el accidente ya estaba controlada en torno a los 3 minutos la aventura de turno, protagonizada desde apenas tomada la salida por Markel Irízar (Euskaltel), que será compañero de Lance Armstrong en el RadioShak el año que viene, Francisco José "Cata" Martínez (Andalucía), Anthony Roux (Francaise), Martijn Maaskant, holandés del Garmin y Lieuwe Westra, compatriota del anterior, del Vacansoleil.

El pelotón se planteó la búsqueda y captura de los fugitivos. El Columbia y el Liquigas, que no hace canasta con Bennati ni por casualidad, se pusieron manos a la obra. Olía a la cuarta de Greipel. Todos fueron cayendo, uno a uno, como engullidos por un monstruo hambriento. Menos uno, Anthony Roux, que decidió sublevarse ante la dictadura de los esprinters.

Así que arrancó a falta de dos kilómetros de la raya final junto a Maaskant. El holandés no aguantó y dejó las riendas del asunto a Roux, que supo gestionar las pocas fuerzas que le quedaban para levantar los brazos en vencedor. Por una bici. Suficiente para cargarse el guión establecido y aportar una pequeña dosis de emoción en una tediosa semana final de la ronda.

Los favoritos salvaron lo que ellos denominan "un día más", en espera de las etapas del Sistema Central. Este jueves en Ávila tienen previsto reaparecer después de la excedencia de tres días. La Vuelta se lo agradecerá, y los que no se echan la siesta también.

Lars Boom gana en la histórica etapa de Córdoba

Lars Boom se llevó su primera victoria en una grande tirándo de la fuerza que le proporciona el ciclocross durante gran parte de la temporada. A sus 23 años, ya ha conseguido importantes logros que nos presentan a un futuro gran corredor.

Tras unos primeros kilómetros intensísimos, se formó la escapada buena del día con un buen número de ciclistas. David Herrero, Alexander Kolobnev o Leonardo Duque parecían los favoritos para la etapa pero fue Boom el que se lanzó en el puerto de San Jerónimo hacia la victoria. Herrero intentó saltar a por él, pero no pudo con su potencia, ni en la subida, ni mucho menos en la bajada.

Pero uno de los puntos de inflexión de la jornada tuvo lugar en los primeros kilómetros, donde se produjeron diversos cortes en el pelotón debido a varias caídas y pinchazos de corredores como Kiryenka o el líder Alejandro Valverde. Enseguida el Caisse d'Epargne se puso manos a la obra y consiguieron enganchar con el pelotón tras llevar una diferencia de 20 segundos en contra.

Al contrario de lo que muchos podrían pensar, esta vez Alejandro sí que estaba bien colocado en el pelotón. El corte fue fruto sólo del pinchazo, no por un despiste. Esto demuestra que el murciano está más metido en la carrera que nunca.

Ya lo dijo Eusebio Unzué en una entrevista: "Alejandro no ha sido mejor que sus rivales, pero sí ha más regular". Quizá esto es lo que la faltaba a Valverde para saber manejar una grande y parece que ya lo ha aprendido. Resta aún una semana complicada donde sólo pueden darse complicaciones para el corredor español. Deberá estar atento de todos sus rivales y, en especial, de Samuel Sánchez que podría darle algún disgusto en los descensos.

Indurain y Bahamontes también aconsejaron a Alejandro: "Debe dejarse de exhibiciones y centrarse en carrera para no malgastar fuerzas inutilmente", comentaba Federico. "La Vuelta dura tres semanas, no puedes fundirte en pocos días", aseguraba Miguel. El domingo veremos si Valverde ha asimilado estos comentarios.

La Vuelta 2010 saldrá de Sevilla y tendrá jersey rojo de líder

La ciudad de Sevilla será el punto de partida de la Vuelta a España 2010, edición que coincidirá con el 75 aniversario de la carrera, han comunicado esta mañana el director de la prueba, Javier Guillén, y el Consejero Andaluz de Comercio, Turismo y Deporte, Luciano Alonso.

Entre las principales novedades anunciadas en Córdoba figura el estreno del jersey rojo que distinguirá al líder de la ronda española, en sustitución del oro actual.

"La Vuelta cumple 75 años de existencia y Sevilla es un escenario acorde con la historia y tradición de la mejor carrera de España y una de las mejores del mundo, una guinda a un magnífico pastel. Seguiremos vinculados a una Comunidad que tiene un equipo ciclista y que este año ha tenido cinco etapas. La Vuelta apuesta por la innovación y de ahí la creación del jersey rojo", dijo Guillén.

Así, Alejandro Valverde podría ser el último corredor en vestir la prenda dorada si nadie consigue arrebatársela hasta el próximo domingo.

Alejandro: "Hemos salvado las tres etapas positivamente"

Alejandro Valverde aseguró tras mantener e incluso incrementar mínimamente su ventaja con sus rivales en la decimocuarta etapa con final en la Sierra de La Pandera que "tengo ganado un 70% en la semana más dura y la última es más cosa del equipo". "Hay etapas que son peligrosas como la de Navacerrada o Ávila, pero creo que el equipo está muy bien y lo vamos a tener controlado", manifestó.

Valverde señaló que los cinco corredores que le siguen en la clasificación general (Robert Gesink, Samuel Sánchez, Ivan Basso, Cadel Evans y Ezequiel Mosquera) y que están a menos de dos minutos son "los más peligrosos". "No me he puesto nervioso y lo único que he pensado ha sido en coger mi ritmo y no cebarme porque es un puerto en el que te puedes quedar clavado", dijo. En su opinión cuando ha atacado el holandés Robert Gesink su objetivo era mantener un buen ritmo "y mantener la distancia con los de delante" en una etapa en la que únicamente perdió tiempo con los españoles Samuel Sánchez, ahora tercero, y Ezequiel Mosquera, quinto.

El ciclista murciano aseguró que en esta Vuelta'09 ha aprendido a "sufrir y mantener la calma" porque en esta última jornada montañosa del denominado tríptico andaluz "tenía todo controlado, los rivales estaban muy cerca e iban al límite. Todos han arrancado muy fuerte pero al final han ido cayendo". Reconoció que en algún momento se le había pasado por la cabeza que podía perder el liderato pero en seguida vio que "iba bien y estaba todo controlado".

Valverde da un puñetazo sobre la mesa

Damiano Cunego se llevó la decimocuarta etapa de la Vuelta a España. El corredor italiano del Lampre se escapó del grupo de fugados a falta de 10 kilómetros para el final y afrontó la sierrra de La Pandera con una ventaja de más de cuatro minutos.

Fue precisamente en La Pandera cuando los favoritos decidieron atacar a Alejandro Valverde. Ciclistas como Evans, Basso o Gesink impusieron un ritmo muy fuerte y en un principio el líder de la general no aguantaba las pedaladas de sus rivales. Sin embargo, el español sacó fuerzas de flaqueza y no sólo cazó a Evans, Basso y Gessink sino que acabó la etapa metiendo segundos a cada uno de ellos. Sólo Ezequiel Mosquera y Samuel Sánchez pudieron con Valverde.

La etapa entre Granada y sierra de La Pandera, un puerto de categoría especial situado a pocos kilómetros de la localidad jienense de Valdepeñas de Jaén, comenzó con una escapada de nueve corredores. Knees, Fuglsang, Damiano Cunego, Gonzano Rabunal, Lezanun, Palomares, Tankink, Xabier Florencio y De Weert se aventuraron a abandonar el pelotón y en poco tiempo comenzaron a sacar un tiempo más que considerable.

Tras superar sin problemas el Alto de Huelma, la cabeza de carrera comenzaría a tener algún que otro movimiento en el Alto de Los Villares. De Weert y Adrián Palomares intentaron la escapada, pero quien comenzó a poner tierra de por medio fue Damiano Cunego. El ciclista italiano del Lampre impuso un ritmo muy elevado y ninguno de los escapados pudieron seguir su pedalada. Así, Cunego llegó al ascenso de la sierra de La Pandera con un tiempo de más de cuatro minutos con respecto al pelotón y no tuvo problemas para llevarse su segundo triunfo en esta Vuelta a España. El italiano volvió a demostrar su condición de gran escalador.

La emoción llegó en La Pandera
Mientras Damiano Cunego se marchaba en solitario, los favoritos se preparaban para decidirse a atacar a Valverde en La Pandera. Iván Basso fue el primero en intentar marcharse en el tramo más duro del puerto y Cadel Evans no tuvo problemas en seguirle la rueda. Gesink también aguantaba junto a Ezequiel Mosquera y Samuel Sánchez... pero Alejandro Valverde no acababa de responder al ataque. Cuando parecía que al español se le podía escapar el maillot oro en La Pandera, Valverde sacó fuerzas de flaqueza para pasar por la izquierda a Basso y a Evans y dar caza a Gesink, que se había escapado de los dos anteriores.

Sólo Ezequiel Mosquera y Samuel Sánchez pudieron con el líder de la general. Valverde dio una auténtica exhibición en esta etapa y acabó metiendo tres segundos al segundo clasificado, Gesink, y 26 segundos a Iván Basso. La gran etapa de Samuel Sánchez le coloca en la tercera plaza de la general.

La Vuelta no para y este lunes se disputará la decimoquinta etapa con salida en Jaén y llegada en Córdoba. Serán 207 kilómetros de emoción.

Fuente: Marca.com

Valverde se convierte en una líder sólido de la Vuelta en Sierra Nevada

Alejandro Valverde reforzó su liderato en la etapa reina de la Vuelta a España, en Sierra Nevada, y celebró el hecho de "haber alejado a Cadel Evans", víctima de un pinchazo del que no se apercibió en carrera el corredor murciano.

"Hoy se han podido abrir algunas diferencias, sobre todo con Evans,que era el que estaba más cerca en la general y el más peligroso para la última contrarreloj. Ahora alejado, a 1.23, me deja más tranquilo", señaló Valverde.

El jersey oro de la Vuelta explicó que no se percató en principio del pinchazo de Evans, pero cuando se dio cuanto de la desgracia de su rival aprovechó la circunstancia para sacar provecho.

"No sabía que Evans había pinchado, pero aprovechamos esa circunstancia y nos pusimos de acuerdo Mosquera, Basso, Gesink y yo para tirar hacia arriba", explicó.

La bonificación de 8 segundos permitió a Valverde alejar ligeramente en la general a Gesink y Basso, "un paso importante" pero no decisivo, según el murciano,

"Creo que hoy he dado otro paso para ganar la Vuelta, pero queda una semana y mañana tendremos en La Pandera una etapa muy difícil, sobre todo porque ya vamos castigados y hay que ver como responden las fuerzas", dijo.

Valverde destacó el trabajo del equipo, que colocó en la escapada de la jornada a dos hombres, "Purito Rodríguez" y David López. El primero de ellos fue importante en la ayuda del líder en el ascenso a Sierra Nevada.

"Al ir con Purito hemos obligado a trabajar a Basso y Gesink y al final a ambos les he podido picar tiempo. Conocía el terreno porque estuve concentrado por aquí, pero hoy me ha parecido el puerto más duro que cuando venía a entrenar", explicó Valverde.

Alejandro logró resarcirse del mal día que tuvo en esta ciudad, Granada, en 2006, donde perdió La Vuelta en la bajada de Monachil. Esta vez ha aprendido y parece que no se volverán a cometer errores como los de antaño.

En la próxima jornada, la competición saldrá desde la capital granadina, salida de la pasada edición. Los corredores se dirigirán a Jaén con rumbo a La Pandera. Este puerto siempre le ha costado ha Alejandro pero consiguió arrancarle una victoria a lo grande en 2003, donde superó a Heras y Cárdenas cuando no contaban con él para el sprint. En 2006, sin embargo, fue la confirmación del zarpazo de Vinokourov a La Vuelta y el fin del reinado de Valverde. En 2009, otros tres años después, toca victoria de Alejandro.

Moncoutié gana en la etapa reina de La Vuelta y Valverde afianza su liderato

El francés David Moncoutié (Cofidis), antiguo cartero que repartía el correo en París en su bicicleta, ganó la etapa reina de la Vuelta, disputada a través de 172,4 kilómetros entre Berja y Sierra Nevada, en la que Valverde reforzó el jersey oro con los ocho segundos de bonificación del tercer puesto.

Moncoutié, veterano de 34 años que siempre ha militado en el Cofidis desde que pasó a profesionales hace doce años, se ganó a pulso la etapa. Se metió en la fuga inicial, pasó en cabeza los cuatro puertos intermedios y coronó en Sierra Nevada en solitario, como lo hizo la pasada campaña en Pla de Beret. Así que logró su segunda etapa en la Vuelta e igualó las dos que tiene en el Tour.

El ciclista francés, que invirtió en el viaje 5h.09.22, llegó 52 segundos por delante de Ezequiel Mosquera (Xacobeo) y 1.16 minutos respecto a Alejandro Valverde, que buscó y encontró la bonificación de 8 segundos y además picó un segundito al italiano Ivan Basso y al holandés Robert Gesink, sus compañeros del podio tras la eliminación de Cadel Evans, víctima de un pinchazo en el ascenso de Monachil y de Samuel Sánchez, que padeció en dicho puerto.

"Samu" le dejó 21 segundos a Valverde y Evans más de un minuto. Ambos fueron los perjudicados en la consideraba etapa monstruo de la Vuelta, jornada algo más animada que la precedente, pero que tampoco decidió el podio final a falta del tercer acto de la montaña andaluza en La Pandera.

Valverde, el gran beneficiado

Valverde sacó petróleo del pinchazo de Evans, su potencial enemigo número uno en caso de jugarse la Vuelta en la cronometrada final de Toledo. El murciano, que "no sabía que había pinchado Evans", celebró haberse "quitado de encima al australiano".

Así que el líder del Caisse D'Epargne dio un pequeño paso al frente, no definitivo, pues tiene a Gesink a 27 segundos y a Basso a 1.01. Lo que sí sabe el maillot oro es quienes van a ser sus rivales hasta Madrid. Evans pasó al cuarto puesto a 1.23, Samuel es quinto a 1.2 y Mosquera, otra vez el animador de la etapa sexto a 1.46.

La etapa más esperada de la presente edición se animó de inicio con una multitudinaria fuga de 30 corredores en la entraron, aparte de Moncoutiè, dos hombres del líder, "Purito" Rodríguez y David López, otro del Rabobank de Gesink, Juanma Gárate y alguno no muy lejano en la general, como Dani Navarro (Astana), a 3.2 del líder. Mala fuga para el Euskaltel, que tenía que defender la posición de Samuel Sánchez en la general.

Moncoutié, octavo en la general el año pasado y rey de la montaña, seleccionó la fuga a un grupo de tres en el Puerto de la Ragua, frontera entre las Alpujarras granadinas y almerienses. Con el se fueron el estonio Taaramae y el belga Moorenhout. El galo se dedicó a puntuar en cabeza todas las cimas de la etapa, una a una, por lo que renovará casi seguro el maillot morado de mejor escalador.

El ex cartero, un hombre tímido, alérgico al mal tiempo y a las carreteras mojadas, quiere dejar ya el ciclismo, así que actuó con una ambición marca de la casa que le puede permitir colgar a gusto la bicicleta. En Monachil puso los cimientos para repetir éxito en la Vuelta. Allí arrancó en solitario para sufrir los 8,6 de ascenso al 7,9 por ciento de media. Se tragó impasible las rampas del 16 %, luego aguantó el impulso del grupo de favoritos que volaba por detrás y se presentó en meta tan feliz para firmar su tercera victoria de la temporada y la decimosexta en su trayectoria profesional.

Monachil también fue el escenario de las escenas más interesantes entre la alta jerarquía. En la otra etapa, en la de verdad. El Liquigas de Basso tenía ganas de probar suerte y tensó la cadena. Enseguida sacaron conclusiones los chicos de la escuadra italiana, pues cedieron a las primeras de cambio Samuel Sánchez y el estadounidense Tom Danielson, que pasó del cuarto al noveno puesto de la general. Un buen trastazo para el estadounidense del Garmin.

Mientras Moncoutié hacía su trabajo, el grupo del líder fue recogiendo cadáveres de la fuga inicial. Por eso Valverde recibió la ayuda de "Purito" Rodríguez, y Gesink la de Juanma Gárate. A Basso le quedaba Kreuziger y a Mosquera David García Dapena. Los favoritos bien armados, menos Evans, siempre solo, sin compañeros al abrigo.

Precisamente Evans fue el primero en descolgarse, pero no por ataque alguno de sus rivales, sino por un inoportuno pinchazo, tremendamente inoportuno, en plena subida. La desgracia de uno fue el comienzo de la fiesta para otros. Valverde, Basso, Gesink y Mosquera no miraron atrás, para qué. Un enemigo menos.

Quedaba la subida a Sierra Nevada, el techo de la Vuelta, a 2.380 metros, con 16 kilómetros al 5,5 por ciento que ya picaban las piernas. Volvió a saltar tímidamente Basso, que tiene más ilusión y ambición que fuerza, sin ningún efecto. Y luego pasó a la carga Mosquera, con tiempo fresquito, como a él le gusta. El gallego despegó hasta en tres ocasiones, y a la tercera , a falta de dos kilómetros se emancipó, por fin.

Faltaba la pedrea de 8 segundos de bonificación. El único botín personal de la etapa reina. Ahí Valverde no tuvo que sudar tinta. Impuso su esprint final y recogió las migajas de una jornada que tampoco enamoró a nadie. El premio colectivo se lo repartieron entre los inquilinos del podio a costa de Evans. El pinchazo juntó voluntades y repartió alegrías. La más grande y gratificante para Moncoutié. El cartero siempre llama dos veces. Y ambas en las cumbres.

Hesjedal se impone en Velefique a un confundido David García

Ryder Hesjedal (Garmin), un gigante canadiense forjado en la bicicleta de montaña, conoció la gloria en el Alto de Velefique, cumbre de la duodécima etapa en la que el holandés Robert Gesink (Rabobank), tercero, logró ocho segundos de bonificación que le permiten alzar la voz como candidato a la Vuelta, ya pisando los talones al español Alejandro Valverde, que conservó el maillot oro.

Hesjedal, protagonista de la fuga del día, conquistó la inédita meta de Velefique en duelo mano a mano con el español David García Dapena (Xacobeo), que cedió en los últimos metros ante la fuerza del canadiense. A los 28 años se estrenó en la Vuelta, logró la segunda victoria del Garmin y abrió su cuenta de la temporada.

La tercera plaza fue para Robert Gesink, que ratificó su condición de candidato con un ataque seco y fulminante a dos kilómetros de meta que dejó plantados a los favoritos, que no pudieron responder. Entró junto a Ezequiel Mosquera (Xacobeo) a 6 segundos de Hesjedal y sacó 10 segundos, aparte de los 8 de bonificación, a Valverde, Evans, Basso, Danielson y Samuel Sánchez.

Un detalle de clase de Gesink, un joven de 23 años con pedigrí de escalador que hace soñar a la afición holandesa. Un corredor de futuro que debutó como profesional en 2005 y que ya fue octavo en la Vuelta hace un año. En el pasado Tour se cayó y a la media hora del accidente ya estaba pensando en la ronda española. Genio y ambición que se plasmó con el golpe en la mesa que dio en la cumbre almeriense.

Una forma de alzar la voz juvenil ante los ilustres. Valverde logró mantener el maillot amarillo, pero recibió un aviso importante en la primera gran etapa de montaña de la trilogía andaluza. El líder del Caisse D'Epargne no parece imbatible, como dijo Basso.

El australiano Cadel Evans (Silence) se mantuvo a 7 segundos de Valverde. Y tercero, a 18 segundos, aparece Gesink, el único corredor que rompió la disciplina impuesta por el equipo del líder a lo largo de la etapa.

La Vuelta cobra emoción por las apreturas en el furgón delantero. Nadie domina y con los premios de la bonificación cualquier cosa puede suceder en las dos próximas etapas con final en Sierra Nevada y La Pandera.

Del nivel del mar en Almería a los 1.810 metros de altitud del inédito Alto de Velefique, a lo largo de 179 kilómetros, con una inversión de cinco horas y media en el trayecto. Todo ese tiempo es el que se tiró el Caisse D'Epargne controlando la carrera en defensa del oro de Valverde. Los de Unzue se pusieron el mono de trabajo desde el banderazo de salida. Todo el equipo al frente por la sierra almeriense. Y los demás a rueda en espera de acontecimientos.

Ajenos a la estrategia del líder y sus hombres, fueron abriendo camino 11 valientes al paso por Tabernas, por el puro desierto del "espaghetti western". Algunos de la nobleza del ciclismo, dispuestos a "pegar tiros" en la etapa. Allí estaba, por ejemplo, el triple campeón mundial Oscar Freire. El cántabro está a punto de dejar la Vuelta, lo hará en Granada, pero antes quiso prestar el penúltimo servicio al Rabobank, antes de ponerse a pensar seriamente en el Mundial de Mendrisio.

El grupo cabecero salvó el primer paso por Velefique con 7 minutos de adelanto sobre el pelotón del comandante Valverde. Un puerto exigente, de 13,3 kilómetros que se adentra en una montaña árida y pedregosa, bonita, diferente, con un paisaje en cada curva. Un chequeo a un ascenso que había que afrontar en el capítulo final de la jornada.

Sin cambios en el siguiente puerto de primera: Calar Alto, a 1.980 metros, un prolongado ascenso de 24 kilómetros por la Sierra de los Filabres que culmina junto al observatorio astronómico. Ninguna estrella destacaba por sus innumerables curvas. Si acaso, el kazako Vinokurov empezó a vivir su calvario particular poco antes de retirarse junto a su compañero Jose Luis Rubiera. No está el líder del Astana para muchos trotes. Los dos años de arresto le pasan factura. En la cima que alberga un telescopio de 1,5 metros de diámetro la renta del grupo de vanguardia se mantenía en torno a los 8 minutos.

La carrera espabiló en las inmediaciones de Velefique (segundo paso), cuando el gallego David García Dapena tensó la cadena en la fuga. Los escapados se fueron desperdigando a medida que el asfalto apuntaba al cielo cada vez más cerca. Por detrás los hombres de Valverde seleccionaron el grupo de favoritos en torno a los 20 corredores. Duelo en cabeza por llevar el timón: el bielorruso Kiryienka de Caisse y el polaco Szmyd del Liquigas. Valverde versus Basso.

García Dapena se lanzó por la segunda etapa xacobea, pero recibió la visita de Hesjedal, un rodador que se hizo profesional en 2005 con la camiseta del Discovery Channel, cuando Armstrong aún ganaba el Tour. Juntos acordaron llegar hasta las inmediaciones de la cima, a ese punto en el que ya nadie conoce a nadie. Ahí el canadiense arrancó para acabar de un plumazo con el sueño del pontevedrés. Entró eufórico el pivot de 1.90 que milita en el Garmin, el equipo de Farrar, que ganó en Caravaca.

Por detrás, Kiryienka reventó de tanto tirar en cabeza y cedió los trastos a Dani Moreno. Nadie se movió, excepto Mosquera, que metió la directa y se marchó.

Luego Gesink, con la camiseta abierta, a pecho descubierto, decidió presentar su candidatura. A dos kilómetros de meta se disparo como una flecha, en un arranque a lo Contador. Nadie le siguió. Se exprimió a fondo, boqueando con un pez para alcanzar un significativo tercer lugar.

Fuente: Todociclismo.com