martes, 13 de abril de 2010

Purito confirma las espectativas en Orio


El español Joaquím 'Purito' Rodríguez (Team Katusha) se ha destapado hoy con un impresionante ataque en la primera de las subidas a la pared de Aia y ha obtenido un espectacular triunfo en la quinta etapa de la 50 Vuelta al País Vasco, 170 kilómetros de recorrido entre las localidades guipuzcoanas de Eibar y Orio con seis altos puntuables por medio.

Purito ha alcanzado la meta con 14 segundos de ventaja sobre un terceto de corredores entre los que se encontraban los dos primeros de la general, el murciano Alejandro Valverde, que ha mantenido el liderato, y Chris Horner, que continúa a solo 1 segundo del murciano.

Horner y Valverde se jugarán el triunfo final en la contrarreloj final

Junto a ellos, ha llegado Samuel Sánchez, que ha sido segundo en meta por delante de Valverde y Horner. En cambio, ha cedido 1:10 en la línea de llegada el corredor de Rabobank Robert Gesink, que ha comenzado la etapa tercero en la general a solo 1 segundo del líder, pero que ha visto como se esfumaban sus opciones al triunfo final.

El vencedor de la etapa ha gestado su triunfo en la primera de las dos subidas al alto de Aia, un muro considerado como alto de segunda categoría, de menos de 2 kilómetros de longitud y con tramos superiores al 22 por ciento de desnivel que ha hecho retorcerse sobre su bicicleta a los corredores.

Probablemente por la desventaja de 48 segundos que tenía en la clasificación general, a Purito no le ha respondido nadie cuando ha atacado nada más aparecer las duras rampas de la sorprendente cuesta descubierta por la organización hace dos años, hoy repleta de público a ambos lados de la subida.

Pero lo que no esperaban sus rivales, fundamentalmente Valverde y Horner, era que iba a poner en jaque el liderato del de Las Lumbreras, que tuvo que reaccionar en la segunda subida a Aia para proteger el maillot amarillo que hacían peligrar los 42 segundos de diferencia que llegó a alcanzar el catalán.

El arreón del murciano reventó el pelotón de los mejores, que, no obstante, volvió a reagruparse tras la bajada, aunque sin Robert Gesink, quien, posiblemente por una caída, cedió en meta 1:10 y todas las opciones de triunfo con las que contaba.

El descalabro del holandés, que no acaba de enganchar una actuación en carreras importantes a la altura de su prestigio como escalador, y los 20 segundos de diferencia sobre el grupo de once corredores que entraron tras el trío que luchó por la segunda plaza, le han permitido a Purito encaramarse a posiciones de podio, por delante de Jean Christophe Peraud y Beñat Intxausti, las dos grandes revelaciones de la carrera.

Los resultados de hoy han dejado la victoria final de la prueba en manos de Valverde y Horner, a quienes no parece nadie pueda alcanzar en la contrarreloj de 22 kilómetros con salida y llegada en Orio.

El favoritismo, a priori, recae en el español por clase, palmarés y el hecho de que va a tener referencias, ya que el segundo que les separa es casi insignificante. Más relevante es el tiempo que ceden sus perseguidores respecto al líder, 34 segundos Purito, 38 Peraud e Intxausti y 45 Andy Schleck, que hoy no se ha dejado ver.

Mañana se decidirá la prueba en la contrarreloj final de Orio, 22 kms. sin altos puntuables, pero si una subida relevante -a Aia, aunque por sitio diferente y bastante menos duro que hoy- en el primer tercio de etapa (km.6,7) y dos pequeñas cuestas más, el repecho de Dike y el alto de Txanka, en los 4 últimos kilómetros.

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