Samuel Sánchez protagonizó una de las acciones más polémicas del Mundial de Stuttgart. Cuando Rebellin y Kolobnev parecían cazados en la última vuelta, se produjo la fuga definitiva en el repecho más duro del circuito. Óscar Freire, el líder de la Selección, no pudo meterse en una escapada en la que se colaron Bettini, Schumacher, Evans, Schleck y, en un principio, Samuel. Paco Antequera le había confiado la misión de vigilar a los hombres peligrosos al final de la carrera, pero en el descenso del repecho, cuando había dudas y nadie quería cargar con la responsabilidad de tirar del grupo, se lanzó al ataque en vez de marcar a los rivales y esperar a Freire, que entonces "estaba mejor que en toda la prueba", en palabras del tricampeón. Samuel explica que atacó porque "Óscar se había cortado" y vio el momento de jugar sus cartas, porque Antequera le dio "libertad de movimientos" en los giros decisivos. "Pensaba que podía hacer daño en la bajada y luego, cuando se fueron por delante Bettini y los otros, Boogerd me impidió enlazar con los que se iban a disputar las medallas al trazar mal una curva".
Él era uno de los líderes de la Selección y asume su parte de responsabilidad: "Tanto Freire como Valverde se encontraban mal al final. Yo traté de irme, aunque sufrí algunos calambres en el muslo y no estaba tan bien como esperaba".
El capitán español, Carlos Sastre, respalda a Samuel, ya que "era el único que podía conseguir metal de los tres que compartían los galones".
No pensaba lo mismo Óscar Freire, que explica con una mezcla de enfado y resignación lo sucedido el domingo: "Durante muchos kilómetros fui mal, con lo justo, pero cuando se llegaron a las dos últimas vueltas empecé a tener buenas sensaciones. El problema es que no podía estar a los cortes y, luego, al sprint".
Por su parte, el seleccionador, Paco Antequera, no cree que la maniobra de Samuel rompiera el campeonato, ya que achaca la mala actuación a la falta de fuerzas. "Valverde y Óscar no estaban finos. Alejandro debería haber corrido la Vuelta a Polonia para coger unos días de fondo y Óscar tendría que haber disputado varias etapas más en la Vuelta a España, porque se retiró muy pronto". El caso es que Paolo Bettini supo aprovecharse de la falta de sintonía y piernas del equipo nacional.
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