El español Alejandro Valverde volvió a estar con los mejores en la primera etapa alpina y ha recuperado la confianza en su ciclismo y en sus fuerzas, por lo que mantiene su objetivo de ganar alguna etapa más sin renunciar al podium de París."Es muy difícil pero no imposible", asegura el español en la segunda jornada de descanso del Tour en Italia.Noveno de la general a 4:11 minutos del líder, el luxemburgués Franck Schleck, Valverde sabe que está a dos aguas, suficientemente vigilado como para que no le dejen entrar en las escapadas y demasiado lejos como para luchar por el podium."Es que los de arriba están fuertes y son muchos. Ninguno falla, va a ser difícil que llegue allí", asegura el ciclista que, ahora más que nunca, sabe que dejó escapar el Tour en su desfallecimiento en el Tourmalet.Valverde ha sumado ya una victoria en este Tour y mira con ambición las dos etapas alpinas que restan. "Son muy bonitas y duras. Ambas son diferentes. La primera más de estrategia, la segunda más de resistencia", afirma.El problema es que el ciclista de Murcia tiene un nombre, una reputación y que los gallos del pelotón no le darán mucho margen. "Es difícil que me dejen meterme en una escapada y en las etapas de los Alpes es muy probable que llegue alguna fuga, como sucedió en Prato Nevoso", señala.Esa era la mejor etapa para que Valverde hubiera sumado un nuevo triunfo, pero llegaron cuatro hombres escapados y Valverde tuvo que conformarse con estar entre los favoritos.Al español le queda un compañero menos, tras la retirada de Oscar Pereiro, víctima de una aparatosa caída en el descenso del Col Angel que estremeció al pelotón y que, finalmente, se ha saldado con un brazo roto."Te temes lo peor, cuando vi la bici y no le vi a él me asusté. Luego le busqué y vi que estaba consciente, le hablé y me tranquilicé un poco. Pero ha sido un milagro", asegura Valverde.Será un peón menos para conseguir ese nuevo triunfo. "No tenerle resta, claro está, pero el equipo está fuerte, podemos intentar cosas", asegura.Valverde habla con cierta nostalgia de la carrera, porque no está entre los mejores de la general. Le hubiera gustado ser uno de esos seis ciclistas que pelean en menos de un minuto de margen por los puestos de prestigio, pero su desfallecimiento en el Tourmalet le apartó de la primera línea de la lucha.Su director, Eusebio Unzúe, asegura que fue consecuencia la caída que sufrió en la quinta etapa y, sobre todo, de la dura recuperación. "Eso le restó algo de forma y en el Tourmalet hay que estar al cien por cien", asegura el técnico.Aquella etapa acabó con victoria de Riccardo Riccò, eliminado por dopaje del Tour. ¿Sin él en la carretera las cosas habrían cambiado? "Lo cierto es que el Saunier tiró mucho en el Tourmalet cuando me quedé descolgado y eso aumentó la renta. Pero nunca se sabe", afirma Valverde con cierto tono de amargura.
1 comentario:
Vamos Valverde, que es eso de rendirse. Sólo se da por perdida una batalla cuando uno se rinde, lo único que necesitas para ganar es atacar, inténtalo que sólo queda una etapa dura en los Alpes. Ánimo.
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