sábado, 13 de junio de 2009

Valverde sigue líder: "He sufrido mucho, como todos, pero estoy muy contento"


Alejandro Valverde, del Caisse d'Epargne, se mantiene al frente de la general de la Dauphiné Liberé tras la disputa de la etapa reina, séptima y penúltima de la carrera, en la que se impuso en solitario el francés David Moncoutié, del Cofidis.

Alejandro Valverde mantuvo con clase el tipo en la dura jornada entre Briançon y Saint François Longchamp, sobre 157 kilómetros, con las superdificultades en el camino del Galibier, la Croix de Fer y un final en alto.

El ciclista murciano, que aún no sabe si podrá estar en el Tour de Francia, pasó sin dificultades tanto por el Galibier como por la Crioix de Fer, y sólo tuvo que exprimirse para defender el liderato en los últimos 12 kilómetros de ascenso. Pero no hicieron mella en él los crueles ataques de Evans y Contador

Moncoutié ganó en solitario con 41 segundos de ventaja sobre el holandés Robert Gesink (Rabobank), segundo; el australiano Cadel Evans (Lotto), tercero; y Alejandro Valverde, cuarto. Alberto Contador (Astana) acabó a 55 segundos tras perder comba en los últimos metros.

Alejandro Valverde afrontará mañana la última etapa vestido de líder, por delante de Evans y Contador. El último viaje será entre Faverges y Grenoble, sobre 146 kilómetros.

David Moncoutié, de 34 años, volvió a ganar en la Dauphiné Liberé diez años después de su primer triunfo. El escalador francés se marchó ya en solitario en el ascenso a la Madeleine, tras dejar atrás al suizo Mathias Frank.

El francés llegó a disponer de dos minutos y 30 segundos de ventaja a los pies del puerto de la Madeleine. Nadie pudo darle alcance hasta la meta en Longchamp.

Se trata del segundo triunfo de la temporada para Moncoutié tras una etapa en el Tour del Mediterráneo, en el Mont Faron.

El ciclista murciano declaraba tras la etapa sus sensaciones a lo largo de esta durísima jornada:

“Hoy era el día más difícil y lo hemos salvado. Estoy por supuesto muy contento, no puede ser de otra forma. La etapa ha sido durísima, con dos puertos de categoría especial y uno de primera para terminar. Los ataques han sido continuos desde la salida y al final se ha hecho un grupo de 25 corredores delante. He podido contar con el apoyo de todos mis compañeros de equipo, que una vez más realizaron un gran trabajo, para controlar la carrera en la parte inicial.

En la parte final nos encontramos los tres mismos favoritos juntos, Contador, Evans y yo. Evans ha arrancado diez-quince veces y cada vez a tope pero tenía fuerzas para contenerle.
He sufrido mucho, creo que como todos, y eso es normal en una etapa como esta. Sabía que Evans me iba a atacar por estar a solo 16 segundos. El no tenía otra solución que la de arrancar y arrancar para intentar descolgarme. Demostró en la crono que era muy fuerte y que la Dauphiné hubiera podido ser suya también.

Queda solo un día, que será mucho menos duro que hoy, pero habrá que ser muy atentos hasta el final. La última etapa no es decisiva porque el puerto está lejos de meta y si me Evans me ataca allí luego, con el gran equipo que tengo podremos organizarnos y pillarlos.

Quiero dar las gracias a la afición por su apoyo. El público francés es genial conmigo y espero ganar esta carrera también para ellos.”

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