Alejandro Valverde (Caisse d'Epargne) resalta que a todos los favoritos les espera "un test importante" de cara a sus opciones en el Tour con la disputa de la contrarreloj de Albi, de 54 kilómetros, y que el murciano prevé "muy larga y dura".En la meta de la duodécima etapa, sin cambios reseñables entre los favoritos, el corredor murciano admitía que la crono es "un test importante: Va a ser una crono muy larga y muy dura, con un recorrido variado, pero me siento bien y espero tener un buen día".
Tras los Alpes, el jefe de filas del equipo de Eusebio Unzúe reconoció que ya se han "visto" las diferencias en la alta montaña y que ahora toca ver las que habrá en la lucha contra el crono, en la que la clave para Valverde estará "en la recuperación de cada uno".
Tras los Alpes, el jefe de filas del equipo de Eusebio Unzue reconoció que ya se han "visto" las diferencias en la alta montaña y que ahora toca ver las que habrá en la lucha contra el crono. "Creo que la incógnita es la recuperación de cada uno y mañana las cosas serán más claras", añadió al respecto. Además, el murciano sabe que se entra en la fase decisiva de la carrera con "cuatro etapas muy duras, con esta crono y luego los Pirineos" y que será "la llave" de la victoria final.
"Creo que estoy en buena condición, así como también mis compañeros Oscar Pereiro y Vladimir Karpets y espero que todo nos saldrá todo bien", sentenció.
Por su a parte, el líder de Saunier, Iban Mayo confesaba no estar "preocupado en exceso" por las diferencias que pueda perder respecto a los especialistas en la contrarreloj, pues, desde su punto de vista, en "la montaña" podrá recuperar tiempo: "Para mí van a ser mucho más decisivos los Pirineos y allí se van a marcar diferencias más grandes", sentenció Iban Mayo, actual tercer clasificado en la general del Tour de Francia.
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